¿Qué es Dieta Fodmap?

Salimos del médico. Que no tenemos nada. Que todas las pruebas están bien. Que lo nuestro es estrés. Que hay que seguir investigando. Pero que, mientras, hagamos una dieta Fodmap. ¿Una dieta Fod… qué?

Vamos a ir desentrañando un poco en qué consiste este tipo de dieta.

Realmente a una Dieta Fodmap tendríamos que llamarla una Dieta Baja en FODMAPs, es decir, baja en todos los compuestos susceptibles de ser fermentados por nuestra microbiota intestinal. Sí, sí, todo aquello que encontramos en frutas, verduras, legumbres, hortalizas… ¡Pero si eso es lo que necesitamos comer para tener una salud de hierro!

Es cierto que al principio parece un contrasentido, pero tiene su explicación, ya que esta dieta se utiliza como dietoterapia específica para aliviar los síntomas tan molestos y tan tristemente comunes hoy en día como la distensión abdominal, gases, pesadez estomacal, diarrea o estreñimiento.

Y precisamente por privar a nuestras bacterias de su alimento favorito, no la podremos mantener a largo plazo, sino lo justo para aliviar la sintomatología digestiva. Por eso a mí me gusta llamarla Dieta Fodmap y no Dieta baja en FODMAPs. Porque para mí hay tres etapas clave: una fase baja en FODMAPs, otra de introducción de FODMAPs y otra alta en FODMAPs, que será la que necesitamos seguir a largo plazo. Para mí una Dieta Fodmap incluye las tres etapas, no solo la primera, que es la restrictiva.

Esto puede sonar todo muy complicado, pero lo iremos simplificando a nivel práctico. Ejemplo:

  • Dieta baja en FODMAPs: evitamos comer manzana o bien le pegamos un mordisco a una manzana o rallamos un trocito de manzana en nuestra ensalada.
  • Dieta de introducción de FODMAPs: nos tomamos media manzana y vemos qué pasa.
  • Dieta alta en FODMAPs: nos hacemos una rica compota de manzana para mimar a nuestros bichitos.

Y ya veis que he elegido un alimento controvertido como la manzana, alto en FODMAPs y que mucha gente hace años que no toma de ninguna forma. Porque estamos acostumbrados a hacer dietas bajas en FODMAPs siguiendo listas de «Apto» o «No apto», como si solo existiera el blanco y el negro. Hay mucha escala de grises, ya no solo por el contenido de FODMAPs de los alimentos, del tipo de alimento, de su grado de maduración, de su forma de cocción… Sino porque cada cuerpo es una profunda escala de grises, y lo que le va bien a una persona, no le va bien a otra y viceversa.

Por eso mi tarea aquí es intentar mostraros esa escala de grises, para intentar que nuestra Dieta Fodmap sea lo menos restrictiva posible, tanto para nuestra salud mental como para nuestra salud intestinal, ambas muy importantes.

Y antes de empezar con cualquier receta o idea, tenemos que tener claro qué son estos FODMAPs de los que hablo con tanta naturalidad. Y si ya los conoces, te invito a que les pegues un repasillo conmigo: ¿Qué son los FODMAPs?