Fase 1: De relajación

Como os dije antes, en las fases de la dieta, yo prefiero llamar a esta primera fase una fase de relajación. Porque si yo te digo que vamos a hacer una dieta de eliminación o de restricción, tu mente ya se bloquea y sufre antes de tiempo pensando en lo que va a querer comer y no va a poder.

A mí me gusta centrarme siempre en lo positivo, así que, sí, vamos a limitar algunas cosillas, pero por tu bienestar digestivo, para aliviar a tu intestino de demasiada carga de fibra, que no es que sea mala, ni mucho menos, pero si tu microbiota no está equilibrada, no va a poder digerir la fibra correctamente y nos va a dar más problemas que beneficios.

En esta fase de «relajación» vamos a eliminar, por tanto, la mayor parde de alimentos ricos en fibras (sí, sí, esos alimentos que todos sabemos que son muy sanos), pero solo con el fin de rebajar los síntomas mientras intentamos solucionar la causa que ha provocado esa disbiosis. Aquí nos vamos a centrar solo en la dietoterapia que acompaña a este proceso de recuperación.